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domingo, 28 de agosto de 2016

Soledad que guía


Y la vida avanza. Continúa.
No importan las circunstancias, mientras haya un buen álbum que escuchar, y personas a quien sonreír, y abrazar.
Mientras el Tiempo nos preste momentos para compartir charlas, intercambiar palabras y entregar una parte de nosotros a quienes deseen recibirla.
No puedo dejar de escuchar ese álbum que muestra en su portada una luna teñida de rojo. Simplemente me hace experimentar una sensación de Paz, indescriptible.
Y las lecturas, los libros por leer que aguardan pacientes, en el librero. Y los que faltan por escribir, que esperan en el tintero. Digital o físicamente, hay tanto que expresar, imaginar y plasmar.
Que no falte la Música, la Intención y la Inspiración para lograr las grandes cosas que se hallan grabadas en el corazón.

Imagen editada digitalmente, original tomada de la cuenta oficial en `Twitter´ de Ray LaMontagne.

Escucho:
Part two: In my own way | Ray LaMontagne

viernes, 26 de agosto de 2016

Bitácora de Vida


Lo que aprendí en el reciente viaje, tiene que ver con la perspectiva de cómo vivir, cómo comprender la Existencia, las circunstancias, y el tránsito por la Vida. Cada travesía es una analogía, en ocasiones una metáfora, que en cada fase, nos ha dejado lecciones, a través de vivencias y momentos únicos, que han ampliado el horizonte, la manera de percibir las cosas. Cada viaje ha traído consecuencias, reflejadas en proyectos, a veces arquitectónicos, a veces textos transformados en libros, otrora fotografías, vídeos, o demás evidencias que hemos compartido por diversos medios.

En esta ocasión no fue la excepción. ¿Habrá algún producto tras la vivencia de lo que paulatinamente asimilamos y comprendemos? Es muy pronto, o muy tarde, para saberlo.
Hace meses descubrí que la Salud se encuentra afectada por una situación que ha transformado, ha comprometido nuestra vida. Es sarcástico, irónico, sorpresivo conocer que tus expectativas de existencia de repente se encuentran limitadas de formas que no puedes entender, y en un primer momento, aceptar. En momentos como éstos, cuestionas lo que has hecho a lo largo de los recientes años, y en mi caso de qué me sirve ser arquitecto, escritor, hombre, catedrático, nadador, o cualquier título que quepa en este renglón y que complemente los ejemplos dados.
Me separé de todo aquello que valoré como inútil y falto de sentido tras una noticia de considerar posibles décadas, como años, como meses. Renuncié a mi trabajo dentro de mi área laboral, que me vio crecer más allá de trece años, aunado a la indiferencia de las personas con quienes debía laborar a diario. Tras diferencias, y desacuerdos en las decisiones no fundamentadas y carentes de dirección, entiendes que la Vida no es la misma para todos. Quizá los demás tengan tiempo para invertir en conflictos y en situaciones vanas, relacionadas con el poder, el castigo, y la satisfacción de dominarlo todo, sin empatar con nada o nadie, sin atisbar la opción de desarrollo, de comprender que podemos mejorar si trabajamos en conjunto, si nos abrimos a aprender de quienes nos rodean, sin tacharlos de ignorantes o estúpidos. Por más de un año fueron los calificativos que escuché día tras día.
Me alejé de la Arquitectura, tomando la decisión de no diseñar o construir más, porque el tiempo y los recursos debían ser re-direccionados a salvaguardar la integridad física, forzado todo por las circunstancias experimentadas. Durante más de diez años compilé excelentes experiencias en la práctica profesional y disciplinar, aprendiendo sobre la Construcción y la Supervisión, en valiosas lecciones y retos disciplinares donde pude hallar resoluciones con apoyo y colaboración de personas sabias, honestas y comprometidas, de quienes aprendí y valoré esa faceta práctica de mi carrera.
Cuando tu vida sufre un revés de esta envergadura, las reestructuraciones son necesarias. Tienes dos caminos, continuar sin cambio alguno, aceptando que las cosas no pueden mejorar, resignándote cómodamente a que las circunstancias se corromperán sin que puedas hacer algo al respecto, con la idea de que cualquier esfuerzo por tu parte no conseguirá modificar lo que ha sido durante tantos años. Ése es el pensamiento confortable que la gran mayoría de las personas tienen de la vida y de todo cuanto les rodea, cayendo en la mediocridad y en la seguridad del fin de las cosas y la perpetuidad de la corrupción e indiferencia.
El otro camino el más difícil y complicado es replantearte por completo como ser humano, quién eres, lo que realmente eres capaz de hacer, y generar un punto de inflexión, para reestructurarte y reestructurar la perspectiva de todo lo que te rodea.

He mirado la reacción de lo que esto conlleva. La envidia, el rencor y el disgusto de quienes alguna vez te conocieron. Agradezco la confianza y la compañía de quienes me han mostrado el lado contrario, recordándome con un simple gesto que a veces es un milagro ante mis ojos, que la Vida vale la pena, que el esfuerzo no tiene fecha de caducidad y un simple abrazo, una sonrisa, o una solicitud para platicar de lo que acontece en el trasfondo personal, es el camino hacia la plenitud y el desarrollo personal, sin importar el desenlace corporal, biológico y físico ya escrito en tu cuerpo.
Al final del día, meses después del inicio de la tormenta más oscura y densa que he vivido hasta ahora, las personas que más amo están conmigo, las compañías sorpresivas de quienes no imaginaste o no conocías te abrazan y cobijan, y la Arquitectura me muestra que la Construcción no lo es todo en la Vida. Idiotas somos si pensamos que el ser zapatero sólo involucra reparar los zapatos. Ser un verdadero zapatero es la analogía incomprendida de saber andar por la Existencia, reparando con cada paso, las decisiones tomadas, las no tomadas, y las que dejamos que los ignorantes disfrazados de conocedores, nos impongan.
Cuando se me solicitó rediseñar el programa que hoy opera, comprendí que mi profesión no representa sólo un campo. Inútil es hacerles ver a los demás que una asignatura que no miran sobre el papel no significa que la preparación de miles de futuros arquitectos se ha ido al carajo. Irse al carajo con la actitud y las perspectivas mediocres que destilamos en todo momento es lo que lleva al desastre, pero ahora no me bajan de inútil y pendejo. Cansado estoy de caminar por los pasillos y ser señalado como el responsable de una decisión no tomada, o que nadie quiso tomar, pero de la que ahora todos se quejan. Es la actitud más sencilla. La más cómoda.

El viaje realizado con el que inicio la narrativa de esta nota me enseñó que nada es eterno, que  lo que diseñamos va más allá de lo que construimos, porque lo construido alcanza niveles de existencia que sobrepasan nuestras inútiles capacidades como seres humanos y arquitectos, siendo nuestro nombre un sinónimo de pequeñez, que nada tiene que ver con las valoraciones que las personas harán de aquello que ideamos. En la mayoría de los casos, ni siquiera estaremos para valorar el resultado de todo cuanto hicimos.
Pero eso no se enseña en los programas educativos. Esa difícil lección de afrontar, de confrontar con la Muerte, con lo efímero que la Vida representa. Porque sufrimos cuando nos vemos limitados físicamente, por circunstancias que no tienen respuesta o tratamientos, alternativas qué seguir para perpetuar nuestra existencia. Y pensamos que el éxito es ser un profesional, imponer nuestra voluntad e ideas a los demás, e invertir en lo material como si la Vida durara para siempre. Que no nos falte el trabajo, el dinero, la casa, las comodidades.
Pero, ¿qué hacemos cuando nos falta la Vida?
Gracias a Pepe y su familia, a Armando, a Edna, a Kathy, a Alberto V., a Jazmín, a Alejandro, a Fernando V., a Florina, a Montserrat, a Miguel N., a Diana, a Carlos, en último momento a Diego, y a tantas personas durante las últimas semanas, por mostrarme lo que realmente importa. Lo olvidamos siempre, hasta que algo radical y sorpresivo nos recuerda para qué venimos a esta Tierra. Y entonces despertamos, aunque parezca ser muy tarde, nunca lo será si reflexionamos y recapacitamos.
Finalmente entendí la sencilla pero poderosa lección que reza: Nunca tendremos lo que queremos, pero sí lo que necesitamos.
El fracaso en el campo que quieran, incluida la pérdida de la oportunidad de Vida no existe.

Escucho:
Ouroboros | Álbum por Ray LaMontagne

jueves, 25 de agosto de 2016

Uróboros

Ouroboros, el mejor álbum de Ray LaMontagne.
¿Por qué de la afirmación?
Nos ha conmovido desde la primera escucha.
In my own way, nos ha arrancado las lágrimas. Así, no más.
Las guitarras son estruendosamente sublimes. Esa Fuerza, que cala el alma, que atraviesa al espíritu. El eco angelical de las voces, desdibujadas en los coros.
Y esa maldita sensibilidad. No existen palabras para describir… ni corazón que lo soporte.
LaMontagne nos ha arrojado una tromba emocional, una tormenta apocalíptica, encerrada en un puñado de ocho melodías, divididas en dos ciclos, cual transición diurna-nocturna, sin avisarnos siquiera, sin tener compasión de nuestra ignorancia.
Si antes lo consideraba como un cantautor manufacturado de Talento puro, hoy me retracto. Es de los pocos escritores de canciones que es capaz de capturar, de encerrar un instante de Vida en poco más de ocho minutos. Extraordinario don.

Hey, no pressure, reza, mientras el resto de nosotros morimos de melancolía y tristeza infinita mientras derramamos las lágrimas que la tormenta emocional tras la catástrofe, nos ha dejado. Tromba de sentimientos, cuyo autor, desalmado, nos ha lanzado, sin piedad alguna.
Ciclo interminable de incertidumbre y de dolor, que representa vivir esta simple Vida.
Visual, y musicalmente, esta travesía de cuarenta minutos de duración, me ha transformado, de maneras que no puedo describir aún.
La última vez que esto aconteció, fue tras escuchar el álbum de LaMontagne, Trouble.
De vuelta al inicio de todo…

Imagen que abre nota modificada digitalmente, original tomada de la liga:

Imagen segunda, tomada de la liga:

Escucho:
Part one: While it still beats | Ray LaMontagne

miércoles, 24 de agosto de 2016

Reflexiones bajo la lluvia

Haga lo que haga, o deje de hacer, llevo la Arquitectura integrada a mi ser.
Durante los pasados meses, tomamos decisiones, y distancia, de muchas cosas, eventos, circunstancias. Hoy, sólo horas antes a la escritura de esta nota, me doy cuenta que la Arquitectura es una actividad que llevaré conmigo a lo largo de la Existencia, unida a absolutamente todo lo que emprenda, lo que haga.
Y lo que aprenda.
Quiero dedicar esta nota a la Directiva del Colegio de Arquitectos del Estado de Hidalgo, A. C. A ellos, por la confianza, pero, sobre todo, por enseñarme a creer en las circunstancias, en mí mismo, y recordarme que una gran parte de mí lo conforma el espíritu de esta hermosa profesión, que, en los días más oscuros, me brindó Luz, calor, guía, una dirección para mantenerme firme, afianzado a algo, y poder permanecer de pie, en compañía de personas que, aún en silencio y a distancia, siempre permanecieron a mi lado, brindándome su Fuerza, su apoyo.
Gracias de corazón.
Un abrazo a todos.

Escucho:
Part two: Another day | Part two: Wouldn't it make a lovely photograph || Ray LaMontagne

martes, 23 de agosto de 2016

Delirio en venta

Los invitamos a la Feria Universitaria del Libro 2016, organizada por la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, en las instalaciones del Polideportivo Carlos Martínez Balmori, dentro de Ciudad del Conocimiento.
Nos encontraremos participando en la presentación de un libro, dentro de las actividades de la Feria, lo que aprovecharemos para la venta de los títulos Viento, Letras & Delirio y 12 campanadas hacen un reloj, mismos que se encontrarán en el Stand de la Universidad.
El Sábado 03 de Septiembre, estaremos en Venta Nocturna en el mismo stand.
Aprovecha para conocer estos dos títulos, concebidos desde una perspectiva literaria y experimental, como un acercamiento a la Arquitectura.
¡Los esperamos!

Dudas y preguntas relacionadas con los títulos, escribir al correo electrónico: jefrancowriter@yahoo.com.

Escucho:
Bohemian Rhapsody | Panic! At The Disco

domingo, 21 de agosto de 2016

Ecos siendo escuchados

Hoy, al visitar circunstancialmente la tienda preferida de Cd´s, hallamos lo inimaginable: la reedición del compilatorio Echoes: The best of Pink Floyd. Al parecer, un cambio de los derechos de la banda, hizo posible lo que habíamos creído imposible: adquirir este álbum doble, que buscamos hace tiempo, por más de cinco años, hasta por debajo de las piedras. Y al decir que incluyo a Stonehenge, es quedarse corto…
Este álbum data del año 2001, y fue uno de los discos que logró reunir lo más representativo de la agrupación, después de haber dado lo mejor y último de sí mismos.
Al tener el álbum en las manos, dudé si adquirirlo valía la pena, tras haber buscado y comprado la discografía esencial de Pink Floyd. Sin embargo, el Arte, la concepción misma de un simple compilatorio no ha sido nunca cosa menor para esta banda.
El concepto del álbum, el manejo del Espacio, y el juego de las visuales, donde tocan el espíritu de absolutamente todo su trabajo musical, merece la pena de entrar en cualquier colección de un verdadero fanático.
Echoes representó un adiós definitivo a la banda, donde cuidadosamente integraron una panorámica musical y visual arquitectónica digna de una agrupación legendaria. Desde siempre, Pink Floyd demostró su espíritu hermoso conectado a la Arquitectura. Sus composiciones son cuidadosamente diseñadas, detalladas, sumamente complejas, e infinitamente profundas y multi espaciales. Obras de Arte, como este álbum.
Precisamente ahora, mientras escribo esta nota, escucho este puñado de canciones que jamás creí ver juntas de nueva cuenta, y dentro de nuestra colección.
Lágrimas de Felicidad.

Escucho:
Us and them | Pink Floyd

lunes, 1 de agosto de 2016

Recuperando el rumbo

La labor de compartir las bases del Arte Visual, y de crear consciencia en torno a la interpretación y la valoración del Arte, es una asignación que comenzó hace cerca de año y medio, y que se ha transformado en la herramienta de inspiración que nos ha regresado paulatinamente a lo que abandonamos hace varios años: la actividad creativa. En mi caso, paralelo a ser arquitecto, desarrollamos una vereda alterna en el ámbito de la Literatura, que comenzó a manifestarse de manera ininterrumpida desde los primeros años de estudio dentro de la carrera, y que nos ha dado gratificantes frutos. Actividad que dejamos de lado para continuar desarrollando una carrera profesional en el ámbito de la gestión y la administración dentro de la disciplina, que derivó irremediablemente hacia el retorno a la parte de la creación del Arte, a través de las letras, los libros, las narraciones.
La actividad académica centrada en el Arte ha representado una agradable oportunidad para reencontrarnos, para re-valorar lo que logramos hasta ahora, pero, sobre todo, para  reinventarnos, como escritor y como ser humano. Paralelo a este espacio, hemos diseñado un sitio virtual centrado en el desarrollo personal y logro de Bienestar. Ha sido complicado reencontrar el rumbo perdido, y ante todo seguirlo. El Arte ha sido una brújula que nos recuerda y nos muestra el camino a seguir.
Este ciclo que comienza ha despegado con dos grupos de Artes, que, en un solo día, me han inspirado como hace mucho tiempo no experimentaba, una emoción, admiración, y deseo de crear, de alimentar el espíritu con esa actividad de lectura y de creación artística. Me encuentro reorganizando las piezas en este momento, para encaminar el rumbo hacia esas metas, y entrar en el ritmo creativo que tanta falta hace, desde hace tiempo.

Imagen tomada de la liga:

Escucho:
Sexy ladies / Let me talk to you (Prelude) | Justin Timberlake