.

.

domingo, 19 de marzo de 2017

Un descubrimiento a través del Universo

Descubrí el espíritu real de la Música de The Beatles, después de los treinta años de edad. Mi padre es fanático, y crecí escuchando esporádicamente porciones de su discografía, aunque más en formato compilatorio, por lo que me era sumamente complicado visualizar el número y naturaleza de los álbumes, además de cada álbum mismo, en solitario. Fueron dos álbumes los que compré para la colección de CD´s (una vez que crecí, y la década de los noventa me heredara un ambicioso gusto por la Música) más en sentido de breviario cultural: 1 y Yellow submarine, así podría tener una colección de canciones representativa del grupo. Incluso recuerdo haber obsequiado el álbum Yellow submarine a un excelente amigo, como muestra de haber encontrado una propuesta musical que verdaderamente valía la pena.

En algún momento de nuestra vida, anterior a esta primera serie de hechos, uno de nuestros compañeros de la carrera, cuando estudiábamos, nos presentó el álbum Sgt. Pepper's lonely hearts club band, mientras trabajábamos en su casa (en uno de esos últimos proyectos que te asignan en tus estudios profesionales), y que en ese momento estaba catalogado como el más condecorado álbum de la agrupación.

Hasta entonces, conocía lo básico de The Beatles: sus melodías números uno, y parte de su historia, lo que incluía la edición reciente sin producción original, del álbum Let it be, la publicación de las antologías de la banda con material inédito, y el extraordinario recibimiento del Mundo para Free as a bird reacción que nos pareció fascinante, debo decir, y otras curiosidades de la banda.

Pero no fue sino hasta que, dentro del gusto cinematográfico, nos tocó mirar el proyecto de la directora norteamericana Julie Taymor, llamado Across the Universe que, de inmediato, llamó poderosamente nuestra atención. Nos hicimos sin dudar del álbum, banda sonora original de la cinta, en su edición de lujo, donde escuchamos por vez primera y un sinfín de vecesclásicos del grupo de rock, que jamás habíamos escuchando antes, y de los cuáles teníamos sólo conocimiento.
Comenzamos así la búsqueda de los álbumes más representativos de la agrupación, empezando en primera instancia a revisar listas, como la manufacturada por The Rolling Stone Magazine, que incluía muchos de sus álbumes, cuatro de ellos entre los primeros quince lugares como los mejores álbumes de Música de todos los tiempos.

Nuestra colección comenzó o más bien, continuó, entonces, con: Rubber Soul, Revolver, Sgt. Pepper's lonely hearts club band y The White álbum. Escuchar a The Beatles en su etapa madura nos hizo perdernos por mucho tiempo de su etapa inicial, de la que tuvimos conocimiento cuando nos hicimos de los dos álbumes que integran la colección Live at the BBC. Para ese entonces nos encontrábamos firmemente encarrilados dentro de las vías, para hacernos fanáticos de su propuesta.  

A partir de ahí, nos hemos concentrado no sin dejar pasar algunos otros años en escuchar, disfrutar y asimilar la Música temprana de la banda, de la que nos perdimos por concentrarnos en lo más comercial y exitoso de la agrupación. Escuchar por primera vez It won´t be long hace un par de semanas ha sido una de las experiencias sensoriales más impresionantes que hemos vivido, tras haber escuchado primeramente la versión actual para el proyecto cinematográfico de Taymor.

Como lo habíamos comentado en algún sitio de las redes sociales inmediatas, ha sido una coincidencia circunstancial, cómo hemos llegado al verdadero espíritu de la banda, y hacernos de su discografía, miles de años después de su existencia.


Imagen editada, original tomada de la liga:

Escucho:
A hard day´s night || Little child | The Beatles

No hay comentarios:

Publicar un comentario