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lunes, 31 de octubre de 2016

Calaveras fantásticas y dónde escribirlas

Foto por Diana Pérez Silva
Un encuentro con La Catrina, un viaje inesperado a una realidad alterna, la visita de la Abuela Chelo, y muchas, muchas realistas pesadillas que involucran demonios, es el resultado del final de este Octubre, que nos da muchas cosas en las cuales reflexionar.
Estos días siempre han sido favoritos, tal vez porque el día de nacimiento se encuentra precisamente en este mes. Los colores, los adornos, las figuras, las siluetas, las sombras y los olores. ¡Oh, hermosos olores! Si pudiera guardarse el inigualable y exquisito olor de la Flor de cempasúchil en el teléfono móvil con alguna app, ¡qué feliz sería al poder olerla una y otra vez durante los días más apagados y tristes!
 La Luna ha sido algo extraordinario a lo largo de este mes. El ambiente de frío y las noches claras, con nubes relucientes navegando en la bóveda celeste.
Hace algunos días que no escribíamos. Tal vez aguardábamos por el catalizador perfecto, ese que nos disparara directo a la Imaginación.
Como ya es nuestra costumbre, escribimos la calaverita de este año, que circunstancialmente tuvo varias coincidencias visuales para acompañar. La última peculiarmente es nuestra favorita, sin lugar a dudas.
Disfruten estos valiosos días, donde la Muerte consigue desbancar a la Vida, en una serie de travesuras que nos hace pensar en lo volátil de nuestra humana existencia.



La Monja y el flaco

Un bello entierro tuvo esta tarde lugar,                                                            
cuando al arquitecto Franco sepultaron,                                           
es que el pobre no tuvo oportunidad,                                                 
todos lloraron cuando su muerte les narraron.                               

Desafortunado el semestre que inició,                                                 
se topó con un grupo lleno de conflicto,                                             
en sus tutorías él iba más que invicto,
maldita la hora en que se involucró.                                                    

A nadie le deseo una Muerte tan nefasta,
ni siquiera al peor de los pederastas,
el arqui sólo deseaba poder ayudar,
asesinado es como se le va a recordar.

Su grupo seguro planeó todo el arguende,
cuando vio que asignatura reprobarían,
convocaron demonios y unos cuantos duendes,
sin saber que la realidad alterarían.

Murió a manos de una aparición horrible,
que aprovechó esta oportunidad terrible,
una monja diabólica de cara sonriente,
se llevó al arquitecto flaco y malviviente.

Desde el Infierno el hombre no tiene descanso,
nunca se consideró un tipo del todo manso,
regresará del Otro Lado para su venganza,
planeando lentas y agonizantes matanzas.


Escucho:
Erupt & matter | Moby & The Void Pacific Choir

martes, 25 de octubre de 2016

Un mural...

Ese mural ha sido un compañero de viajes.
Afortunado fui desde el momento que arribó a mi vida.
En él encuentro la primera vista al despertar, me recuerda aquellas formas sensuales y hermosas que deleitan la pupila. La razón que me hizo decantar por el Espacio, en vez de las Letras o la Música. En esta última no soy bueno. No hallé manera de seducir a la Dama de los Sonidos armoniosos. No pude seguirle los pasos raudos de su movimiento grácil. Decidí enamorarme de los momentos y los ritmos empedrados, congelados. Esas pautas pétreas detenidas para una porción de Eternidad, y establecer un tórrido romance con esas texturas, esas formas, encontrando cualquier oportunidad para utilizar la narrativa, y contar experiencias, compartir delirios, espaciales, naturales, humanos…
Esa panorámica ha sido una pieza importante en mi existencia. Ha visto mis metamorfosis periódicas, en la búsqueda por las razones para mantenerme activo. Por hallarme y sentirme vivo.
Adicción a los colores ocre. A los atardeceres.
Vistas, colores, pinturas, pinceladas, trozos de Arte.
Ensoñación pura.
Miles de sueños, docenas de proyectos.
Y un amanecer más para diseñarlos, para trazarlos.

Escucho:
The A Team | U.N.I. || Ed Sheeran

Añoranzas I

El sonido del piano, tenue, resbala por mis oídos, mientras miro al cielo del ocaso.
Mis ojos, perdidos, miran más allá del horizonte, más allá del Universo conocido.
Hace tanto que no sueño, hace tanto que no escribo.
Sólo escucho las palabras de quienes me rodean, hablando de intereses y preocupaciones relacionadas con el por qué de la no Excelencia y otras banalidades.
De por qué no somos perfectos, como ellos, del por qué no nos convertimos en lo ideal, en eso que transformará para bien el Mundo, que pondrá fin al Cambio Climático.
Y el sonido del Silencio se cuela hasta los huesos. Camino lentamente por la vereda de tierra, donde nadie más osa caminar, recordando los pasos que alguna vez dimos, antes de ser humanos.
Recuerdo tus ojos. Rememoro tu sonrisa.
A nadie le importa a dónde has ido.
A nadie le importa siquiera que te has ido.
Sólo hablan de las injusticias del Mundo. De lo mal que los demás los tratan, sin reparar en lo horrible que tratan ellos mismos, a quienes les rodean.
Críticas por doquier emergen de sus bocas, cuando ni ellos mismos han sido conscientes de lo que han hecho o no para merecer la responsabilidad de juzgar con argumentos que no reconozco.
Transitan, raudos y veloces. No hay descanso. No hay espacio ni momento para una charla personal, para un abrazo íntimo, y necesario.
Nada se detiene. Nada importa.
Y camino de regreso la misma vereda. Parecen haber transcurrido siglos desde entonces.
Silencio. Indiferencia.
Y desórdenes obsesivos compulsivos de aquellos deseos, anhelos que murieron en el intento de ser, convirtiéndose en pobres reflejos de espíritus caídos.
Raídos…
Y escribo sin descanso tras la tristeza del Vacío.
Extiendo el manto de la Melancolía sobre mi cama, sobre la mesa de trabajo, delante de los anteojos que todo lo miran, analizan, y contemplan.

Busco Esperanza, busco una señal que me indique que aún vale la pena continuar andando. El cuerpo hace tiempo ha renunciado, pero el espíritu es terco, y mantiene el rumbo, hacia una dirección que no logro vislumbrar en este momento, o en alguno.
Y ceso de escribir. Debo concluir esta carta, especie de Manifiesto ante Todo y ante Nada.
¿Quién lo leerá? ¿Quién encontrará estos pensamientos entrecruzados con un atardecer hermoso, cual tallo que crece entre miles de tallos en medio del campo abierto?
¿En medio del Dolor? ¿A un costado de la Desesperanza?
Miedo a callar sin poder comunicar al Silencio aquel anhelo de hallar la Verdad debajo del tapete de entrada a nuestra casa, tras un día de labor intenso, y estar agotado.
Cansado de vagar, cansado de andar.
Deseoso de escribir.
Hoy ha sido suficiente.
He escrito demasiado.
He dicho lo requerido.
Quizá más de lo deseado.
Dedicado a Edgar Montañez H.

Escucho:
A case for shame | Tell me || Moby featuring Cold Specks

domingo, 23 de octubre de 2016

Paradoja narrativa de superhéroes

Tiempo atrás escribí una nota relacionada con lo impresionado que había quedado al ver la película animada Planet Hulk, de Marvel, y esa complejidad narrativa y psicológica plasmada en una animación que en primera instancia uno pensaría que es para niños, pero no es así.
La anterior película animada que había hecho trizas mi asombro y que amé durante mi tardía adolescencia fue Titan After Eart, de Fox Animation Studios, que en esa época me hizo soñar qué digo soñar… ¡Delirar! con el espacio sideral, además de incluir piezas de mi entorno literario y musical, como la Ciencia Ficción aplicada al Cosmos, y colaboraciones musicales por Texas o Jamiroquai.
Ahora, muchos años después de esas notas y experiencias, detengo mi vida y le brindo ochenta y tantos minutos de ella a DC Cómics, para adentrarme en esa narrativa temporal que a últimas fechas está tan en voga en las viñetas, las series de televisión, y las adaptaciones cinematográficas de superhéroes.
¡Woaw!
Después de ver íntegra la animación titulada Justice League: The Flashpoint Paradox, me ha costado conciliar el sueño, por el grado de complejidad, incongruencias de universos y alto grado de violencia, que ha tocado mi más profunda psique.
Antes de escribir esta nota, he debido realizar la obligada investigación de rigor, para comprender la naturaleza y objetivos de la historia dentro de los cómics, y de los estudios DC, desde luego. Sin haber leído el cómic original, puedo decir que lo que plantea la animación es una bizarra y muy atrevida propuesta de intervención y juego temporal, donde vemos cómo los Universos clásicos de los superhéroes son trastocados como el fin e inicio de una nueva narrativa por parte de los estudios que hoy por hoy llevan las historias de nuestros personajes favoritos.
No hablaré de lo que encontrarás en la película animada, sólo que es un impresionante despliegue narrativo y visual del que tienes que correr a la par para no perderte. Como conocedor de nivel medio del Universo DC, me he perdido, caído y extraviado en más de un bache, por no ser altamente conocedor de los últimos acontecimientos de las respectivas series, pero, al final del día después de haber mirado la cinta, comienzo a saborear ese extraño, amargo, dulce, interesante sabor de boca que ha dejado. Finalmente Titán… y Planet Hulk hicieron lo mismo.
Una incongruencísima permítaseme el término diferencia de narrativa y realidades entre el Universo clásico y el planteado, me ha puesto los pelos de punta, me ha arrancado más de una exclamación con grito ahogado incluido, y un par de momentos donde mis ojos se abren como platos de spaguetti italiano, al mirar con asombro lo que acontece en esta cinta. Eso sí, la producción se mira a lo largo del desarrollo del proyecto, repleta de manufactura oriental, con esos tintes manga y esos suspiros tipo Evangelion, con los que estoy afortunadamente familiarizado gracias a mi hermano menor.
No puedo dar una conclusión definitiva. Estoy oxidado y fuera de práctica, por completo. Mi sentido (arácnido) narrativo no ha sido utilizado desde hace más de tres años, así que debo terminar de asimilar lo que mis ojos han visto, y lo que mi pobre cerebro ha experimentado.

Eso sí, el buen Barry Allen que en este momento goza de gran popularidad entre los jóvenes y no los tanto… se lleva la película con su inocencia infantil y su sentido de humor, y la figura de Batman (nótese que menciono `figura´, no diré más…) me ha conmovido hasta raspar mi garganta.
La última secuencia del Hombre Murciélago, recibiendo un obsequio de The Flash, como evidencia definitiva de su mal lograda travesía temporal, me dejó en silencio y boquiabierto, muchos minutos después de haber concluido la cinta y mi equipo de cómputo escupiera el disco que la contenía…

Concluiré confesando que tenemos otra historia de cómics cinematográficos aguardando en la repisa, y que esta vez involucra al Joker.
Deberá aguardar unos días de necesario luto. Mi ser infantil debe recuperarse para la siguiente experiencia de Vida.
Es grato estar de vuelta…

Imagen que abre nota, modificada digitalmente, original tomaba de la liga:
Segunda imagen, tomada de la dirección electrónica:

Escucho:
Naughty | Gwen Stefani
Good | Better than Ezra

Instantes únicos...

En los últimos meses hemos salido de toda rutina y de zonas de confort establecidas.
Nuestra vida se ha caracterizado por cambios constantes y por búsquedas interminables, sin hallar aún la seguridad de dedicarnos a algo específico.
Gracias a proyectos y asignaciones varios, es que hemos navegado por infinidad de actividades, y descubierto intereses, pasiones y circunstancias en las que antes no nos hubiéramos detenido a experimentar como lo hacemos ahora.
La experiencia de impartir charlas relacionadas con la Fotografía nos ha dejado un puñado de satisfacciones al percatarnos que las Artes son un interés que los jóvenes poseen, y que gracias a su curiosidad, gustos y talento natural, pueden explorar de maneras académicas, gracias a las potencialidades que los programas educativos les ofrecen hoy en día.
Durante los recientes años, he mirado con asombro las transformaciones radicales que los programas académicos han sufrido, y me he dado cuenta de igual manera de la resistencia y la indiferencia con que algunas de las autoridades lideran dichos programas, lo que me ha hecho perder la Fe en algunos puntos, lugares y con personas con las que trabajo de cerca en la labor académica y profesional diaria.
Muchos han sido los esfuerzos realizados, aprovechando las circunstancias, para experimentar y llevar a cabo cambios de diversa índole en el ambiente académico, que me han dejado enorme aprendizaje y la oportunidad de convivir con estudiantes, profesionistas, artistas y/o personas con diferentes disciplinas y puntos de vista, lo que me ha servido para ampliar el panorama, y enfrentar la metamorfosis que vivo desde meses atrás.
Es sorprendente conocer la visión, platicar con los estudiantes, y adentrarme en los principios de múltiples disciplinas, y mirar que al final del día todas tienen la misma esencia humana y creativa, que nos puede y debe dejar enseñanzas para convertirnos en mejores personas de lo que hoy somos.

Puedes hacer click en las fotos para verlas más grandes.






Escucho:
Fortunate son | Creedence Clearwater Revival
Chinatown | Toto

martes, 11 de octubre de 2016

Más y más movimiento...

Actividades diferentes, experimentales, son las que disfrutamos por estos días. La oportunidad de interactuar con diferentes licenciaturas al mismo tiempo ha sido algo que no esperábamos, y ha dejado una retroalimentación indescriptible. La perspectiva es amplísima, y nos ha permitido desarrollar una visión mayor, que encierra intereses, gustos, habilidades…
Salir de la rutina ha sido bueno, una terapia magnífica para replantear los objetivos y las metas. Una oportunidad para sonreír, al descubrir el talento, la disposición y la inquietud de cientos de jóvenes, que encuentran paulatinamente en las Artes Visuales, una manera, una herramienta de comunicación y expresión para transmitir mensajes, ideas, anhelos.
No cabe duda que las Artes han sido pieza fundamental para mantenernos proactivos, y concentrarnos en la Vida, en continuar disfrutando los momentos y todas las actividades inmersas en ellos.
Gracias a los estudiantes y a los profesores de Artes Visuales del Instituto de Ciencias Básicas e Ingeniería por acoger la idea, y llevarla a la realidad, de una manera increíble.

Comparto las imágenes de las sesiones a mi cargo, con tres de los grupos más interesados, que he conocido.
Click en fotografía para agrandar

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Escucho:
What will come | Travis

sábado, 8 de octubre de 2016

Inspiración y Creatividad

Nueve años antes, un día anterior.
Siempre me he sentido familiarizado con Tom Yorke, de una manera inexplicable. Soy seguidor de su banda Radiohead, pero no un fan aguerrido, sólo un admirador de su trabajo. Yorke es una de esas personas que ha inspirado mi vida de formas inexplicables. Hombre, ni siquiera lo conozco.
Su creatividad, su maldita manera visual de expresarse es algo que me vuelve loco. Posee un raciocinio creativo que aún continúo estudiando y analizando a detalle.
Sus álbumes como solista me han fascinado de igual manera, pero nada como ese lenguaje fantástico, natural y fluido con el que salpica por doquier cuando se inmiscuye en cualquier proyecto de génesis de naturaleza creativa.
Radiohead inspiró la creación del sello Architectiak, que ha significado nuestro estilo de vida, diseñado, pero sobretodo, consolidado durante los últimos seis años, y que nos ha traído un cambio radical en muchos sentidos, pero, más que nada, un pensamiento y actuar distante de los modelos y reglas establecidos, y que asimilamos para confrontar, aprender, y continuar con la misión y los objetivos establecidos.
Desde siempre, la metamorfosis creativa ha sido un campo extrañamente ligado a mi vida y a las decisiones que he tomado, y aún hoy, continuamos atravesando un fuerte período de aceptación, asimilación y cambio, del que esperamos emerger con respuestas, así como un horizonte claro hacia el cuál caminar.

Imagen tomada de la liga:

Escucho:
Daydreaming | The numbers | Radiohead

miércoles, 5 de octubre de 2016

Cálculo del Universo

Soy afortunado en muchas maneras, no importa que no sea de la manera que más anhelo en este momento. El hecho de que no tengas la continuidad temporal asegurada, no significa que no sea feliz, o no disfrute lo que sí tengo a mi lado.
Fui un niño lento en todos los sentidos. Aprendí a escribir tarde y a resolver divisiones con decimales más de un año después que el resto de los niños. ¿Jugar básquetbol? Hasta entrados los catorce años. En Matemáticas no me consideré nunca excelente, ni siquiera bueno. Lo mío siempre fueron las letras. Aprendí a leer y escribir rápidamente, pero a redactar muchísimo tiempo después de lo normal. También me vislumbraron lento en ese ámbito.

Siempre he dicho que fui afortunado al tener a los padres que poseo. Desde que tengo uso de razón estuvieron ahí, conmigo, no importando si yo era lento, o lentísimo, ellos siempre se tomaron el tiempo para gastarlo conmigo, aunque no aprendiera como sé que ellos esperaban.
Compartí hace unas semanas la anécdota que retrata a mi padre siendo mi catedrático en los estudios del Bachillerato. Aunque sabía que no me dedicaría a ramas relacionadas puramente a la Matemática, decidí tomar el reto de experimentar a mi padre como profesor, sabiendo de antemano que él era una eminencia en esa Ciencia, y yo no tenía conmigo ni siquiera los principios básicos.

Siendo niño, él me enseñó pacientemente todo lo relacionado con la Aritmética, el Álgebra y la Trigonometría. A veces me recuerdo a mí mismo leyendo y resolviendo los ejercicios, tan lentamente, que el reloj de la cocina se detenía en las noches que me dedicaba tras su jornada laboral. Sin embargo, él siempre estuvo ahí.
Hoy mi padre se jubila voluntariamente de la universidad donde impartió clases por más de veintiocho años. Durante el año anterior, y gracias a la experiencia que tuve en un puesto adjunto de administrador, pude aprender y apoyarle en los cambios radicales que la institución sufrió, y con los cuales afortunadamente estuve más que familiarizado. Debo decir que las noches con él, sentados delante del computador analizando el sistema institucional no fueron jamás una carga. Al contrario, por alguna razón que hasta ahora, mientras escribo estas notas, comprendo, fueron momentos que disfruté enormemente.

La Vida, sin embargo, te brinda reveses, donde esperas que existan momentos felices. Pero la Vida también te enseña que las lecciones arriban de maneras incomprensibles.
Él y yo sufrimos afecciones de Salud. Diagnósticos y tratamientos por más de seis meses, para recuperar el Equilibrio. Tras meses de visitas a médicos y estudios, él se encuentra estable y recuperado del todo. Yo, por el contrario, continúo por el camino de la recuperación, sin encontrarla aún.
Hoy que él ha decidido retirarse, sé que deja detrás de sí una larga historia de años en la enseñanza de las Matemáticas, siendo uno de los tres catedráticos que cambiaron mi Vida de manera radical. Mi padre posee un carácter apacible y sumamente paciente, y es de las personas que te enseña sin palabras, sino con el simple movimiento de sus manos, y su ejemplo. Sobre todo eso. Si lo observas un día, podrás aprender sin preguntarle, sus movimientos y actitudes lo expresan absolutamente todo.
Lo he felicitado por la carrera académica que labró al paso de las décadas. Pero le he agradecido sinceramente por haberme dado la oportunidad de tenerlo como profesor. Sin él, las Matemáticas no me habrían otorgado la lección que compartí hoy con mis estudiantes. Nuestras Intenciones como seres humanos y nuestra actividad como profesionistas determinan la carga positiva o negativa en nuestras vidas, y la Naturaleza de las lecciones que aprenderemos de la interacción entre nuestra esencia humana y nuestro talento.

El Tiempo es relativo. Mi padre no estuvo mucho tiempo conmigo en mi niñez y juventud, por cuestiones laborales. Pero compartió conmigo lo más valioso que tenía consigo: su talento para con las Ciencias Exactas. Alguna vez mamá me contó cómo todos sus profesores lo reprobaron tantas veces en esa rama, que estuvo a punto de perder la carrera. Entonces comprendí que no compartía conmigo el conocimiento en sí, sino la valiosa lección de perseverar a pesar de todo lo adverso, no importando si fuera una persona, un evento, una circunstancia o uno mismo.

Hoy pensamos que lo sabemos todo, que los profesores tienen la obligación de enseñarnos, y que no tienen el derecho de exigirnos como antes porque nosotros aprendemos y vivimos circunstancias diferentes, o somos diferentes... Mi padre me enseñó que las circunstancias son relativas, y que éstas tienden, lo mismo que los Límites, a un determinado valor. Ese Valor es precisamente el límite que nosotros mismos nos colgamos encima, al no valorarnos como personas, y al no escuchar lo que las Matemáticas tienen que decirnos, es decir, las palabras que nuestros padres, hermanos, profesores o seres queridos, tienen que decirnos. Las Matemáticas son sólo otra manera de explicar las Leyes del Universo. De alguien escuché alguna vez: aprende las reglas como un profesional, para romperlas como un artista. Romper las reglas significa reinventarnos a nosotros mismos y nuestras creencias, anhelos y metas, destrozando nuestros propios paradigmas y transformando nuestra realidad. Mi padre ha decidido hacerlo en este período de su vida, y entiendo que es mi momento para asesorarlo en el proceso. Una persona que encara el concepto de Muerte, posee un fuerte potencial a comprender la Vida sin miedos, mentiras o límites; es parte de lo que puedo compartir con él. Lo entiendo, y estoy contento por ello. Todo tiene una razón.

¿He hablado de límites?
No interesa que haya poco o mucho tiempo. El Tiempo es relativo, y quiero pasarlo con él.
Mi padre me explicó algún día: las funciones tienden a un límite, pero es hasta cuando llegan a él, que la función realmente adquiere valor y comprensión.
¡Qué hermosa analogía de la Vida!

Imagen tomada de la liga:

Escucho:
Now I'm here | Queen


sábado, 1 de octubre de 2016

Modo: Encedido


Octubre es un mes significativo para mí. Es un período que, año con año, a lo largo de más de treinta y ocho veces, ha traído aprendizaje a mi vida. Cada año ahora que rememoro se ha encargado de brindarme lecciones representativas. Algunas placenteras, otras todo lo contrario, y ninguna de ellas sencilla.
Los recuerdos que más guardo tienen que ver con el inicio de la escritura de la primera historia, que significó el descubrimiento de la Pasión por la Literatura. Octubre siempre ha sido el ciclo de días preferido para escribir y utilizar esa escritura como medio de expresión, como terapia para encontrar sentido y dirección, cuando la brújula falla.
El primer Octubre de mi etapa de estudiante de Arquitectura fue memorable, por enfrentarme por vez primera a la realidad de los retos de esta carrera, y por representar un período donde comprendí lo duro que sería integrar la Arquitectura a mi Vida. Fue también el mes en el cuál me despedí de mi abuelo paterno, una figura extraordinaria a la que debo muchísimo de lo que ahora soy, como ser humano y como profesionista.
Este año en particular, precisamente el primer día de Octubre, inicio un ciclo desconocido, uno que hacía mucho tiempo me llamaba, y que decidí ignorar, hasta que no fue posible hacerlo más. Comprendo que la Vida se encarga de cumplir los ciclos, las metas, las asignaciones y los objetivos que trazaste diligentemente antes de venir, no importa lo que hagas por ignorarlos. Este ciclo lo comienzo aparentemente lejos de la Arquitectura, pero irónicamente rodeado por ella en absolutamente todos los sentidos. La compañía, los espacios, las reflexiones, los edificios, las panorámicas. Incluso, la analogía del diseño de las variables que te rodean.
Entiendo que esta carrera llegó a mí o yo a ella porque representa un peldaño, un escalón, una plataforma base sobre la cual debía cimentar mi existencia, mis creencias, objetivos y metas. A pesar de no ser un miembro activo por azares del Destino y pendientes existenciales, la Arquitectura continúa guiando el camino, recordándome cada Octubre que siempre habrá algo que rediseñar, una porción de Vida que habitar, y un sueño que capturar, y no desistir hasta tornarlo real.
Son tantas las personas y los espacios arquitectónicos que he conocido, que no tengo palabras para expresar la Gratitud hacia ellos. Muchos son arquitectos, estudian para serlo, o tienen a la Arquitectura tatuada en el corazón. Les pregunto a mis padres de quién heredé la Pasión por la Habitabilidad dentro del Espacio, pero no encontramos respuesta.
Imagino que esta ironía de la Vida, esta obsesión por los espacios, de la que no puedo desistir u olvidar o ignorar o negar, o mucho menos huir, es un deseo que tracé antes de nacer, y que, aunque a veces me genere incertidumbre, dolor, miedo o duda, representa parte de la lección más grande que aún ahora intento aprender: diseñar mi propia Vida, con todas las herramientas, la Pasión y la delicadeza, con la que sólo un arquitecto podría hacerlo.
No me considero uno, o aún me siento muy lejos de ser un arquitecto verdadero, pero la Arquitectura continúa deleitando mis sentidos y llenando el corazón con inexplicables satisfacciones, que, lejos de comprenderse, inspiran a mantener la Fortaleza suficiente para mantenerme en el Modo Vivo: Encendido.

Escucho:
Part one: Homecoming | Ray LaMontagne