Adaptar una historia de cómic a
versión cinematográfica es siempre una labor complicada. Agreguemos el hecho de
que se trata de la casa editorial de cómics más relevante de la Historia, y la
tarea se complica. Si hablamos que los dos personajes protagonistas son los dos
héroes icónicos de los cómics, el intento se torna imposible.
La adaptación que diseña y
entrega Zack Snyder es un producto
final complicado, que ha generado controversia entre los fanáticos, detractores,
y críticos por igual. Snyder ha
demostrado, desde su incursión cinematográfica en 300, que su peculiar lenguaje y ambiente cinematográfico es siempre
fiel a las viñetas de cómic, respetando a la vez que reinterpretando, las
historias que narra. Llevar al cine la historia de Batman v Superman debió representar una misión titánica, en cuyo
destino final –que podemos disfrutar ahora– se mira un puñado de historias de cómics de gran peso e importancia
en el Universo DC.
La versión final es una serie de
circunstancias sumamente difíciles de analizar, por su riqueza y complejidad
narrativa|visual|histórica. Reunir a los héroes de la casa editorial DC, debió
integrar fragmentos de las tramas más representativas de los cómics, escritos
por personalidades que brindaron giros sorprendentes a las tramas en las
historias individuales de los protagonistas, y que modificaron sus vidas de
formas controversiales, pero dolorosamente reales. Snyder respeta al máximo los
momentos clave, reinterpreta otros, personaliza detalles, e integra una
narrativa visual y una trama global que permite realizar algo que el sello
editorial en sus versiones cinematográficas no había conseguido hacer: plantear las bases de proyectos integrados
futuros. Si bien es claro que el sello de la competencia posee ganado este
terreno desde hace una década, DC posee
una historia más prolongada, compleja, multi temporal y fragmentada de cada uno
de sus personajes, por lo que el reto de construir una sola línea narrativa se
torna sumamente difícil.
La versión final de este primer
eslabón es digno de considerarse. El lenguaje visual, la narración, la
integración riesgosa de las partes más delicadas de las historias de Batman y Superman, la presencia en la banda sonora de dos personajes: Hans Zimmer y Junkie XL, especialistas en la psicología que define a Batman y a Zack Snyder respectivamente, el bono de confianza en la producción
de Christopher Nolan, así como un
final sumamente triste, sorpresivo y controversial, logran dar forma y
contenido a esta historia.
Los fanáticos de DC son más críticos
y más difíciles de complacer que los seguidores de las historias de la casa
editorial rojiblanca. No es malo. Así debe de ser. Sin embargo, consideremos
que la complejidad de complacer a un público más maduro y experimentado es
natural. Ellos son adultos, críticos, y han crecido con todas y cada una de las
historias comenzadas en viñetas, y mantenidas en continuidad y vigencia a través
de series de televisión, libros, novelas gráficas, juegos de vídeos, series
animadas, por más de dos décadas. La competencia de letras blancas sobre fondo
rojo no posee esta riqueza histórica-cultural.
Siendo conocedor y seguidor por
muchos años de las historias de superhéroes de DC, considero que la versión
cinematográfica que tomamos de pretexto para esta nota, es un proyecto bien
realizado y serio. Quizá su único pecado fue ése: plantearse con demasiada seriedad, una seriedad ya presentada desde las
páginas de los cómics, donde descubrimos que los héroes de nuestra infancia no
son eternos, son sólo seres que viven, luchan, y pueden partir y cometer
errores, al igual que nosotros, al igual que todos. La analogía de las
críticas y la controversia hallada en esta versión cinematográfica –considero– se basa en la premisa de percatarnos que ese dolor que sentimos,
es una parte de nosotros mismos al saber que hemos madurado, y olvidado que las
historias de los cómics sólo formaban parte de nuestra infancia como una
sencilla inspiración, una que dolorosamente hemos perdido como adultos, y que
buscamos desesperadamente en circunstancias que jamás regresarán, a menos que
replantemos nuestra perspectiva y manera de comprender el mundo que habitamos.
Mientras no entendamos eso, el
dolor que mostramos en forma de crítica no complaciente, sólo será un reflejo
del vacío que nos carcome como infantes tristes, y adultos que no saben cómo (o
no quieren) serlo.
Imagen principal de nota tomada de la liga:
Imágenes secundarias tomadas de la página:
Escucho:
Batman v Superman: Dawn of Justice. Original
soundtrack / Hans Zimmer and Junkie XL
Buena crítica y mejor película para las personas que hemos crecido con estos dos superheroes, y sus cómics respectivos, me pareció increíble la forma en que varios hechos iconicos de ambos fueron tomados y reinventados por Zack Snyder, la mayor crítica es la de los jóvenes que desconocen muchos hechos de la narrativa e inventiva de los cómics,sin embargo a mi me pareció una grandiosa película
ResponderEliminarBuena crítica y mejor película para las personas que hemos crecido con estos dos superheroes, y sus cómics respectivos, me pareció increíble la forma en que varios hechos iconicos de ambos fueron tomados y reinventados por Zack Snyder, la mayor crítica es la de los jóvenes que desconocen muchos hechos de la narrativa e inventiva de los cómics,sin embargo a mi me pareció una grandiosa película
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