Este año que finaliza ha sido una dura prueba.
Tiempo que ha puesto en tela de juicio la pasión, la entrega y la visión en aquello que se soñó y por lo que se luchó para que se cumpliera.
Cierro este ciclo con reflexiones profundas y sinceras.
Hallé -mientras leía en estos días de serenidad personal- algunas líneas que le devolvieron a mi alma la tranquilidad de pensar en torno a todo lo ocurrido.
He aprendido mi lección, y hoy quiero compartirla con todos ustedes.
No valores tu tiempo por la cantidad de momentos -positivos o negativos- que éste tenga. Lo que realmente da sentido a tu existencia es la paz interior que dicho equilibrio te brinde al final.
Dejo a ustedes una cita sublime que refleja claramente lo que quiero decir, y que es lo que deseo para todos ustedes, tomando como pretexto nuestra tradición de cerrar oficialmente los ciclos, considerando que un periodo termina, mientras otro nuevo, inicia. La Naturaleza no sabe de propósitos de año nuevo. El Tiempo transcurre sin cesar, no importando que para nosotros todo un periodo de circunstancias y vivencias en trescientos y tantos días se queden atrás. Los que damos valor a los acontecimientos somos cada uno de nosotros… Qué ironía. La Naturaleza y el Tiempo seguirán, aunque nosotros permanezcamos o no permanezcamos más.
`Haber tenido éxito es haber reído mucho y, a menudo, haber ganado el respeto de los inteligentes y el afecto de los niños, haber sido merecedor de críticas honestas y haber tolerado la traición de falsos amigos, haber apreciado la belleza y lo mejor de los otros, haber dejado este mundo mejorado, ya sea con un niño sano, un bello jardín o la redención de una condición social; saber que al menos una vida ha sido aliviada gracias a mi existencia´.
Ralph Waldo Emerson
Busquen sus sueños. Cumplan sus metas. Emprendan el vuelo hacia los destinos nuevos.
Las metas más codiciadas no son las más caras o valiosas, sino aquellas que te brindan la hermosa satisfacción de regresar ellas un día, bajo la forma de personas queridas, que te abrazan, te besan, te dicen cuánto te quieren, y te brindan su compañía, sus consejos, su tiempo, su comida e inclusive su techo para que, en lugar de sobrevivir, te enfrentes y venzas a tus demonios y vivas plenamente en compañía de lo mejor que tienes [aunque dudes de que existe algo bueno en ti], que no es otra cosa que la fe que los demás encuentran en tu interior, y que a veces olvidas que tú guardas para ti mismo.
Gracias a todos.
¡Y busquen esa plenitud -que cada año postergamos- y que os hará al fin felices!
¡Feliz 2O11!
Con afecto.
J.E.F.
Escucho: Harry's wondrous world [from Harry Potter and The Chamber of Secrets] / John Williams
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