Ha sido tanto lo que hemos compartido, que me siento una parte -muy pequeña, lo confieso- de sus vidas.
Cuando el horizonte se ha abierto hacia un rumbo nuevo y por demás desconocido, ustedes están presentes… con su guía, con su luz.
Los he mirado llegar, crecer, y convertirse en aquello en lo que siempre soñaron. Duele madurar, duele abrirse paso a través de los obstáculos.
Pero siempre están aquí, conmigo, con esas sonrisas y esa alegría que se torna en fortaleza que alimenta el alma.
Ustedes son más que la más simple de las excepciones.
Son únicos, son hermosos.
Son geniales.
Gracias a todos, conjunto de espíritus nobles y fuertes, que lentamente emprenden el vuelo hacia lo alto de los cielos. De todos ellos.
Una parte de ustedes, se queda aquí, para recordarme lo mucho que los amo y los extraño.
Y lo haré por siempre…
Por siempre jamás…
Escucho: Hey, Soul sister [live] / Train
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