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lunes, 12 de octubre de 2020

Gracias por el Presente

Como suele suceder, descubro los mejores álbumes de mi vida, tarde.
Death Cab for Cutie no es la excepción.
Es una banda indie que me recuerda mucho a mi amigo, Heriberto Niccolas, aunque no pueda explicar muy bien por quéHoy precisamente hoy que la lluvia ha caído de súbito, tomando por sorpresa este día soleado, donde todo había amanecido alegre y optimista, es que este álbum llega a mi reproductor digital.

Me he gustado desde la primera vuelta. Encuentro las canciones mucho más melancólicas de lo normal para esta banda, con sonidos nuevos salpicados accidentalmente por aquí, y por allá, aún recordándome muy poco a ese accidente llamado `Kintsugi´, sólo que ahora escucho hablar de circunstancias más maduras, y quizá más duras, complicadas de atravesar: separaciones, dolor ante la opción de continuar solo…

No lo sé, quizá una parte importante de mí así me siente ahora, pero pesa más el fragmento basado en el Agradecimiento por el día que se vive… Precisamente hace unas horas escribí una nota al respecto.
Me siento contento, agradecido por la Vida, por ser capaz de sentarme este atardecer delante del Ocaso, y respirar por primera vez en décadas, la Paz que una existencia serena y satisfecha deja tras de sí.
Muchas despedidas debieron ser.
Separaciones.
Decisiones.
Nuevos comienzos.
Veredas que despertaron temor, por no decir, Incertidumbre, de ser transitadas.
 

No lo sé… Los acordes me recuerdan un poco a Give up, de The Postal Service, y a mi amigo de años, Santiago Oliva, y a los orígenes del camino que en este momento, transito. Un camino que tomó décadas aceptar, pero que siempre debo decir estuvo ahí, pero jamás me atreví a seguirlo, hasta el día de hoy.

¿Valentía?
Me agrada pensar que fue más bien hartazgo, y que la Vida debió presionarme hasta el límite, para decidir, vivir, enseñándome a agradecer por absolutamente todo detalle que hizo posible, este Presente.

 
Imagen que acompaña a nota, tomada de la liga:
 
Escucho:
Summer years | Death Cab for Cutie

domingo, 11 de octubre de 2020

Hoy

Hace cinco años, los doctores encontraron que mi sangre se degradaba. En ese momento tenía en mi mente una vida trazada, que desde niño fui construyendo con mis experiencias, y las circunstancias que me rodearon.
Siempre había realizado el ejercicio de visualización a cinco años de distancia, diseñando metas y objetivos que cumplí en cada oportunidad que tuve, cabalmente.
Siempre.
Hasta el momento del diagnóstico.
Hoy, dos compañeros cercanos a mi vida en diferentes momentos, han muerto de la misma afección.

A ocho meses de Pandemia y Contingencia sanitaria, he continuado actividad y mantenido la Salud, y he visto proyectos emprendedores altamente rentables, que cerraron sus puertas, y no se levantaron más.
Idiosincrasias y pensamientos, que se burlaron de mis decisiones y acciones.
 
Admito que perdí la Fe y el deseo de continuar, en más de una ocasión a lo largo del camino. Y cuestioné a Dios sobre las circunstancias en mi vida muchas más veces de las que recuerdo.
 
Finalmente entendí que la Vida se trata, no de buscar respuestas a nuestras preguntas, sino de construir una existencia libre de dudas e incertidumbre.
 
Las piezas de Plenitud llegan a tu existencia cuando decides vivir plenamente, no para alcanzar dicha plenitud.
Encontrarás Amor cuando te ames compasivamente.
Serás feliz cuando vivas la Felicidad desde tu ser, y no aguardándola por lo que suceda en el exterior.
 
Tendrás un perro que haya salvado tu vida, porque primeramente tú salvaste la tuya, al decidi salvar la vida de él.
 
Se trata de decidir vivir.
No de sólo tener hermosas intenciones de hacerlo.
 
Fotografía por:
Alan Romeo Mendoza.

Escucho:
Killer | Seal