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martes, 14 de junio de 2022

Delante de mí...


Es un buen día para morir…
Es un buen día para preguntarme qué he hecho de mi vida.
Para dibujar respuestas a todas aquellas preguntas incómodas que mi Ego evadió a lo largo de toda mi existencia.
 
El hombre viejo que está dibujado en el espejo.
Mientras el cielo permanece nublado, dominado por el tono plateado que se escurre en las canas que tiñen mis cabellos.
Cerrando los ojos, perdida mi memoria, navegando en cientos de recuerdos que ahogan mi respiración, y estrujan mis entrañas.
 
Y las calles que me vieron caminar tienen escondidas debajo de capas de pintura, las palabras que algún escribí en los muros, mientras nadie me miraba.
Muchos de esos muros han sido asesinados, mutilados, destruidos o simplemente se declararon vencidos, al paso del Tiempo, de los años, de las necedades de los hombres que van y vienen, cual plaga incesante, insaciable, y enferma.
 
El hombre viejo, delante de mí.
La mirada que me escruta penetra entonces en mis más profundos pensamientos, intentando encontrar razones para continuar con vida.
Quizá la mente encuentre maneras de ocultar sus más siniestros secretos, pero el corazón jamás miente.
Una lágrima lo derrumba todo…
Las emociones que se han acumulado dentro de la fortaleza de mi cuerpo tenso, no pueden ser contenidas ni un segundo más.
 
El hombre viejo, y yo.
Me pregunta en un único y sutil movimiento de quijada qué será de mí ahora que me ha encontrado.
Que no existe escapatoria.
Que terminaron las tretas de Evasión, Ignorancia e Inconsciencia.
Cuando la Verdad asoma sin reparos en la piel arrugada de mis manos, en el temblor incontrolable de las piernas, al saberse abatidas por el Olvido y la Tristeza de la Pérdida, y tu partida.
Cuando no hay manera, justificación, ni siquiera excusa…
 
El hombre viejo no perdona.
El Tiempo todo lo consume.
Jamás olvida.
 
Éste es el final.
El principio de la Muerte.
El recuerdo marchito de la Vida.
 
Y mis dedos tiemblan al compás de los latidos de mi corazón debilitado, y en agonía.
Abro los labios para susurrar la melodía que he elegido.
 
Es un buen día para morir…
Es un buen día para preguntarme por qué tenemos que atravesar por esta Agonía de ser humanos…


Escucho:
Old man & me | Hottie & The Blowfish

Imagen tomada de la liga:

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