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domingo, 21 de julio de 2019

Había una vez un álbum negro

Weezer ha sido un grupo que me ha sorprendido a lo largo de los últimos años.
Sus álbumes son aislados, dispares en mi colección de cd´s. Y aunque no poseo su discografía completa, sus recientes proyectos han logrado entrar en mi colección, y me han hecho pasar excelentes momentos.
The black album ha representado una especie de cuadro empático, donde las melodías se han experimentado cercanas y sumamente personales, como si se tratara de un sonido altamente familiar y conocido, con una alta dosis de reflexión, pero también de placer y disfrute.
Con su clásico sello, se han alejado un poco del sonido sucio y la distorsión en las guitarras, así como los ecos y los vacíos espaciales y reverberaciones, para instalarse más en la Balada, en el equilibrio entre lo acústico y lo comercial, logrando un ámbito de convivencia más humano y personal.

El álbum me ha acompañado en los recientes días, y me ha permitido distraerme, sentir placer, leer, reflexionar, escribir y contemplar. Una amplia gama de oportunidades para tratarse de un álbum de Weezer.

Imagen tomada de la liga:

Escucho:
High as a kite | Weezer

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