Una experiencia minera

Visitar antiguos lugares es siempre una experiencia reconfortante. Hace un par de días tuve la oportunidad de visitar El Socavón, un restaurante, dentro de la infraestructura que posee la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, definido sobre un antiquísimo espacio de la capital hidalguense, centrado en el pasado histórico en la actividad minera, y que fue sometido a un proceso de intervención arquitectónica, para recuperar su área y actualizar su función, acorde al contexto actual.

El cúmulo de sensaciones que se viven al interior es interminable. El sitio es hermoso por naturaleza, e intervenido rearquitectónicamente le ha brindado un plus que lo convierte en un espacio rico sensorial y estéticamente.

Las vistas, el aprovechamiento de los materiales originales de construcción, la innovación de los procesos constructivos y estéticos actuales, y pinceladas oportunistas de Arte, bien llevadas, otorgan al espacio de particular personalidad y Belleza.

Quizá el único demérito sea la limitadísima accesibilidad universal.

El espacio habla por sí mismo. Se presenta como una pieza fundamental de la Historia de la Ciudad de Pachuca de Soto, que reclama su lugar en la memoria colectiva. Su vivencia interior se encuentra repleta de Elegancia, Sobriedad y muros y techos anchos, gruesos y sólidos, que no hacen sino convertir una vivencia común, en una experiencia extraordinaria.

Sitios que inspiran, que conmueven, que llaman la atención y deleitan los sentidos, sin lugar a dudas.

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Área de Cava, diseñada por debajo del área de bar.

Escucho:

As we lay | Kelly Price
I wish | R. Kelly