Continuamos con lo que he denominado tendencia cómic, inspirada por las recientes adaptaciones
cinematográficas de famosos superhéroes,
y nuestro retorno al mundo de las viñetas.
Cuando era adolescente, siempre tuve el sueño de escribir y
dibujar un cómic, e, incluso,
participé en la pre-producción de una
viñeta cuando estudiaba en la licenciatura, proyecto que jamás pudo
materializarse.
La idea ha continuado latente, y, a pesar de haber
continuado con el proyecto de escritura
–que nos ha dejado grandes
satisfacciones hasta el momento–, la
creación de una viñeta se mantiene en la superficie externa de lo consciente.
Comparto con ustedes –por
lo pronto– lo que podría llamarse
nuestro primer cuadro de cómic [un
proyecto comienza a tomar forma en una de las esquinas de nuestro maquiavélico cerebro]. Una especie de
reflexión en torno a la Arquitectura,
y cómo ésta es la más afectada durante los desastres nucleares y apocalípticos del
desarrollo de las viñetas de cómic. Tan sólo en las más recientes adaptaciones
al cine de historias de héroes como Los
Vengadores o Superman, las
ciudades, y sus icónicos edificios fueron destruidos en cuestión de minutos,
preguntándonos si cuando los superhéroes luchan, estarán pensando en los
arquitectos que tardan años en diseñar y construir fracciones de manchas
urbanas que ellos borran del mapa en sólo segundos…
Se les agradece –de
todas formas– el trabajo que nos
darían tras severos conflictos de Armagedón,
si éstos realmente acontecieran en la vida real.
Escucho:
Antistar / Massive Attack
L.I.F.E.G.O.E.S.O.N.
/ Noah and The Whale
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